18. Génesis Lliguin.-
Esta separación entre la Fe y la Razón se da en el último periodo de la historia de la filosofía, ocasionandonos el principal desafío entre poder separar la fe y la razón sin perder el valor de cada una.
La fe sin la razón, se ha enfocado solamente en el
sentimiento y la experiencia, teniendo el riesgo de
dejar de ser una propuesta universal. Es decir, no tendría el mismo valor,
pensar que la fe, ante una razón débil, va a tener mayor fuerza, todo lo
contrario, podría llegar a caer en el grave peligro de convertirse solamente en
un mito o superstición.
Del mismo modo, se puede decir que una razón que no tenga ante sí fe, tendría el desafío de luchar para no dejar de sentir ningún tipo de motivación a dirigirse hacia la novedad y radicalidad del ser. Además, se puede decir que, tanto la fe como la razón al estar una sin la otra o ponerse una ante otra, se empobrecen y debilitan. Causando que la razón recorra caminos secundarios que le hagan perder de vista su meta final que es la búsqueda de la verdad.
También, claramente se puede ver cómo la Fe es capaz de
llevarnos más allá del tiempo y lugar en el cual nos podemos encontrar. No está
mal que las personas tengan Fe y crean en la existencia de Dios pero sin duda
alguna también se puede creer en la capacidad que tiene el hombre para descubrir
la verdad a través de la razón, no por esto debe dejar de experimentar algún tipo
de fe.
Por otra parte, se considera que la Fe y la Razón tienen una misma finalidad que es la búsqueda de la verdad. De tal
manera, que puedan llegar ambas a proporcionar el bien para toda la sociedad.
Entonces, debemos tener en claro que tanto la Fe como la Razón no deberían oponerse
una con otra porque realmente son un complemento para llegar a la verdad,
independientemente si ya sea a través de la Razón o la Fe, ambas en su momento
tienen esperanza por un mejor futuro.
Por último, aunque no parezca, en si la Fe siempre va hacer
parte de nuestra experiencia humana debido a que tanto los sentimientos como la
razón están relacionados e involucrados uno con otro en esta búsqueda de verdad.
Ambas
cuentan con pensamientos mutuos, que lo mejor sería que estos sean desarrollados
con rectitud de mente y corazón, que si nos ponemos a pensar juntas pueden
ayudar a descubrir la verdad.
Comentarios
Publicar un comentario